Lic. Jorge R Velázquez Remón.
No se trata del final del otomano Sultán Suleiman o el
imperio Napoleónico, simplemente del dominio de un señor que desde hace mas de
veinte años, tiene entre sus manos, las riendas del softbol Masculino en Cuba y
lo peor de ello es que nunca ha tenido grandes resultado en la arena
internacional, solo a nivel Nacional y ¿?.
Se trata del Señor Albán, que desde hace más de veinte años
lo conocimos debutando al frente de la tropa de su provincia en el Campeonato
Nacional en Santi Espíritu, luego de ser DT del equipo de pelota de Ciego de
Ávila, si ese mismo que desde que su actual manager, ex integrante de nuestro
equipo mayor de Béisbol, Roger Machado llevó al título y se ganó merecidamente
el calificativo de ¨ Los Tigres Avileños ¨ .
Pero bien, este Señor que nunca tuvo buenos resultados en la
pelota, se apoderó del mandato de su equipo, no tuvo buen resultado, pero si vio
muchas posibilidades de escalar, los avileños contaban con algunos buenos
jugadores, los hermanos Echarte (por cierto aún se mantiene el mas pequeño
Roberto), un torpedero que era buen fildeador nulo al bate, pero muy versátil e
inteligente Miguelito Lapera y otros.
Aquellos Campeonatos eran de 8 equipos y los equipos,
mayormente se nutrían de peloteros que tenían habilidades defensivas, nulos al
bate (además nuestro pasatiempo preferido tenía una clase de cantera) y muchos
con bajas estaturas (erróneamente siempre se ha dicho, yo estoy en total
desacuerdo, que el softbol es para jugadores pequeños y habilidosos), eso el
tiempo ha demostrando es solo falsa teoría, se desarrollaban en una semana,
todos versus todos una vuelta a dos juegos entre los equipos, al final sistema
phage.
Fíjense si Alban luego de su primera incursión vio como se
podía llegar a la cima, sin necesidad de hacer softbolista, se valió de mañas y
otras y se llevó para su ciudad, a los mejores talentos de las provincias que
se iban quedando en el camino, ahora le explico. Los dos últimos lugares de esos
Torneo uno bajaba y el otro (séptimo lugar) esperaba por el segundo lugar de un
torneo o segunda división que se jugaba un fin de semana y realizaban dos
encuentros y el ganador subía o se quedaba , ya.
Por lo que muy inteligente el Señor Alban, fue creando un
equipo muy competitivo al extremo de apoderarse de la jerarquía a nivel
Nacional y desbancó a los espirituanos de nuestro amigo y DT Luis ¨ El Pollo ¨
García Rodríguez ó a los santiagueros de Calixto Miyares, nada que todavía hoy
encontramos dentro de su elenco al (jugó un año con Holguín) guantanamero y
mejor lanzador del país Alaín Román y al tunero Campos.
Pero la juventud se impone, malos resultados una y otra vez
a nivel internacional, pero nada es cuestión de la calidad del contrario y
nosotros poco a poco alejándonos de los primeros escaños, y este Señor ahí
pegado al equipo como un chicle, tuvo el privilegio de crear en su provincia la Escuela Nacional con todas las
condiciones con terreno de softbol incluido, y los resultados como un cangrejo
para atrás.
Ya el colmo fue que los santiagueros a pesar de los pesares
y Ciego supuestamente ser la gran potencia en el país lo bajan de la cima (no
importa que este señor tenga tres lanzadores no nativos de la tierra de la
piña, un receptor pinareño, un torpedero granmense y otros que lo harían en
realidad el equipo Cuba, hasta la tercera posición, pues el joven elenco
holguinero, también lo sobrepasa.
Pero lo peor del caso es que con su equipo Cuba y con
jugadores que se apoyan de un bastón llámense Jorge Luis Reguera, Márquez o
Echarte pasan de los 45 abriles y aún forman parte de nuestro equipo principal,
con resultados tan negativos como el último lugar en el recién finalizado
Campeonato Panamericano de Argentina octavo entre ocho conjuntos (pierden en el
área no solo con el Campeón Venezuela, sino también con México y hasta
Guatemala nos aplasta) los Juegos Centroamericanos de Veracruz, serán el
cementerio de nuestro softbol.
Que podemos esperar de ese colectivo de abuelos, se han
quedado atrás simplemente, con entrenamientos que están acordes con el siglo
pasado, jugadores que viven de este deporte y otras cosas que se pueden
desprender de casos como el que le ocurrió al mayor prospecto del país, el
joven lanzador holguinero de 22 años Enrique ¨ Papo ¨ Rodríguez, imbateable en
los entrenamientos al derrotar una y otra vez al supuestamente equipo regular Nacional
y que lo dan a conocer como integrante y luego que el Comisionado Nacional cambió
su nombre por el muy vapuleado Gusbel Plutín.
Nada que es hora de acabar con ese imperio que cumplió su
función en un momento determinado, pero hoy es una gran piedra dentro del
zapato del deporte en el país, juventud divino tesoro, estoy convencido que el
relevo está ahí, pero para eso una buena limpieza nos viene muy bien a todos,
desde arriba y hasta abajo.
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